Derechos constitucionales. Derecho a la vida, derecho a la educación. ¿Cómo se financian? Y, si no se financian, se transforman en un problema, o en muchos, pero tomemos, a modo de ejemplo, la delincuencia, que a su vez genera un costo adicional de protección policial, juicios, sistema carcelario y la muy difícil y también muy costosa rehabilitación. De modo que el no financiar apropiadamente los derechos puede acarrear un costo muchísimo mayor.
En China se admite tener sólo un hijo, nada más. Ha sido dramático el fallecimiento de los hijos únicos en las catástrofes que han habido en China últimamente. Una medida muy drástica puede también acarrear un costo estratégico para una sociedad.
Control de la natalidad. Complicado. Tema que pasa por creencias religiosas, por consideraciones morales.
Cual es mi propuesta. Modestamente, propongo un subsidio decreciente. Un subsidio al que acceden los grupos familiares según su ingreso y según la cantidad de hijos. Porque así como para los padres el presupuesto se divide por la cantidad de hijos, y mientras más son, menos alcanza; creo que de la misma forma el aporte estatal debiera ser decreciente: mientras más hijos, menor el aporte por hijo.
Drástico, muy drástico, pero quizá no tanto como la medida china. Porque el punto es ¿quién se hace cargo después de mantenerlos, criarlos, educarlos, etc.? Se llora siempre sobre la leche derramada, pero no se tiene el carácter suficiente para ser firme en adoptar medidas preventivas.
¿Sería favorecer a las familias ricas? ¿Tendrían más derecho que las familias pobres para tener hijos? ¡Claro que sí! Porque los derechos no son simples enunciados, sino que se deben financiar, y en la medida en que se fomente una procreación y crianza responsable, se logrará que esos niños crezcan para convertirse en personas con educación, que aporten a la sociedad; en lugar de delincuentes que le signifiquen un costo a la sociedad.
¿Se está quitando un derecho? Yo creo que no. Más bien se está fijando una regla que busca cautelar los recursos necesarios para que una persona tenga una adecuada crianza y educación. Es como la plata que se va a la AFP. Podríamos decir que nos están quitando una plata que es nuestra; pero no, sencillamente nos están obligando a destinar parte de nuestros ingresos para cuando ya no estemos en condiciones de realizar un trabajo que nos reporte los ingresos suficientes para subsistir. Los legisladores decidieron y le quitaron a uno un grado de discrecionalidad, pero es que hay individuos que definitivamente no toman las mejores decisiones, y después el costo lo paga la sociedad. Así que subsidio decreciente para el grupo familiar: esa es mi propuesta.
Bueno, seguramente si busco esta idea en Google encontraré que alguien en alguna parte ya lo propuso, pero al menos esto lo escribo sin haberlo buscado, así que no es plagio.
Un complemento: beneficios tributarios para los grupos familiares ricos que hagan donaciones en beneficio de grupos familiares de menores recursos. Y, bueno, se puede ir hilando más fino, pero la idea central es subsidio decreciente.
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